Schuster considera que no hay exusas para el empate blanco

A Schuster le dolió como un pinchazo en la rodilla. El, como sus jugadores, lo vio tan sencillo que creía que a los 10 minutos todo estaba hecho. "La verdad es que lo hemos tenido muy sencillo, se nos ha puesto el partido muy fácil y nos hemos olvidado del marcador. Teníamos que haber ido a por el segundo gol, y no lo hemos hecho. Ese ha sido nuestro gran fallo. La culpa ha sido nuestra". No había ninguna duda. El alemán estaba herido, pero fue de esas noches en que no había que lanzar piedras a ningún sitio, y menos a casa.

Pedja Mijatovic se quejaba en el palco de los partidos internacionales de sus chicos. Las dos teorías tenían fundamento. "No hay ninguna duda de que los jugadores estaban cansados y se ha notado. Durante la primera mitad hemos estado muy bien, pero luego no sé si es que nos creíamos que habíamos ganado y nos hemos venido abajo. Los músculos no funcionan igual tras una semana como la que hemos tenido".
Bueno, vale. Los jugadores, que no son tontos, sabían que se habían librado de una derrota que habría sido un terremoto si Baiano o Movilla, por ejemplo, hubieran marcado el segundo gol. "Mira, no sé si hemos perdido dos puntos o hemos ganado uno. Lamentablemente, nos hemos venido atrás a partir de nuestro gol", afirmó Gago, uno de los más activos durante los 90 minutos.